Antes de llevar a cabo la instalación de placas solares debemos tener en cuenta ciertos aspectos. Su instalación va a traer resultados positivos en el consumo de energía, ya que aunque haya que realizar una inversión inicial elevada, con el paso del tiempo la amortizamos. Sigue leyendo para conocer todo lo que hay que tener en consideración antes de instalar una placa solar.
Tipos de instalación de placas solares
Antes de solicitar un presupuesto hay que distinguir entre una instalación solar aislada o conectada a la red. De ello dependerán los materiales y el precio total.
- La energía solar aislada de la red es un sistema que funciona de manera autónoma para generar energía 100% renovable sin contar con el apoyo de una red eléctrica.
- La energía solar conectada a la red es un panel solar que se complementa con la energía eléctrica.
Tipo de consumo
Hoy en día, la instalación de paneles solares puede realizarse para consumo individual, es decir, para una vivienda; o para consumo colectivo como por ejemplo, empresas. Pero también se puede realizar en una comunidad de propietarios, cada vez más habitual.
- Autoconsumo individual. Este tipo de instalación se lleva a cabo habitualmente. La totalidad del equipo y de la energía generada queda a disposición del propietario, pagando el toda la inversión de su instalación y mantenimiento.
- Autoconsumo colectivo. Ofrece la opción de que varias viviendas o empresas realicen una instalación conjunta de las placas solares. Ello hace que el coste sea menor y la energía se reparte en función de los porcentajes que queden previamente acordados.
- Comunidades energéticas locales son una categoría más institucionalizada. Son agrupaciones de consumidores que está comprometidos con las energías renovables, teniendo intereses energéticos y sociales en común.
Instalar baterías o placas solares sin acumulación
Esta es una de las dudas que más surgen a la hora de instalar placas solares. En viviendas que no estén conectadas a la red, es fundamental contar con este tipo de tecnología.
- Placas solares sin baterías. Esta opción es la más demandada y rentable económicamente. La energía que se genera en los paneles solares se consume en el momento, y lo que sobra se vierte en la red, obteniendo descuentos en la factura.
- Placas solares con baterías. Esta alternativa es de las más sostenibles ya que se aprovecha al máximo nuestra instalación solar. La energía solar que no se consume se queda en reserva para aprovecharla en otros momentos en los que no haya producción. Por ello, tenemos más independencia de las compañías eléctricas, algo que hoy en día se tiene muy en cuenta.
Otros aspectos que debemos tener en cuenta son la garantía de la placa solar, su precio y el mantenimiento que debemos llevar a cabo a lo largo de la vida útil de la placa solar.
- La garantía normalmente suele rondar entre los 10 y 12 años, contando con una garantía de reposición del módulo ante cualquier problema de funcionamiento.
- El precio depende mucho de la calidad de los materiales y de la potencia contratada.
- Es importante contratar una empresa que pueda ofrecer un contrato de mantenimiento anual para cumplir así con las exigencias del RD 842/2002. De este modo, garantizarás la máxima eficiencia de la instalación renovable, cumpliendo con la legislación vigente.
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